¡Bienvenidos al blog de pesca a Spinning en Menorca!

martes, 16 de noviembre de 2010

¿El equipo perfecto?

No. Por desgracia, o a lo mejor por suerte. Para mí, el equipo perfecto para spinning en mi zona no existe.

En base a mi experiencia puedo deducir qué especies y qué tamaño tendrán estas en cada parte de la costa que vaya a pescar. Si sé que los peces no van a sobrepasar el medio kilo de peso y les voy a poder lanzar chucherías ligeritas escojo la cañita para hasta 10g, carrete tamaño 1000 y mono filamento de 0,18mm. La diversión en este caso está asegurada.

El “problema” viene cuando pueden entrar a la muestra peces mayores, en ese caso últimamente me decanto para una BayLiner con acción 7-21g con un Rarenium 2500 y trenza de 5lb, este equipo es muy cómodo, también se disfruta con peces de reducido tamaño y ha aguantado a la perfección peces de más de 5kg, y hasta de 8kg.

Hasta ahí bien...el problema mayor viene cuando entramos en zonas más complicadas, con mucha roca y peces a los que les gusta ésta, o ambientes en los que sea fácil que nos visite un pez de buen porte, o incluso demasiado porte.
En esta situación no sé decidirme ¿escojo una 15-40g a pesar de casi ni darme cuenta cuando pica un pequeño palometón? ¿o me inclino por la 7-21g con el riesgo de que me entre uno de esos bichos malos?

La decisión de la semana pasada fue arriesgar ¿a lo mejor demasiado?. La teoría y la estadística no lo aclaraban, la zona era prometedora, pero nunca había enganchado ahí un pez que me pudiera poner en apuros con la BayLiner y el 2500.
Pronto me respondí a mi anterior pregunta. Sí, había arriesgado demasiado. Las lisas de buen tamaño empezaron a saltar alocadamente. Algo grande rondaba la zona, lanzo un popper y a los 2 o 3 “pops” tengo picada. El animal empieza a cabecear, y en cada uno de los achuchones saca línea, a lo mejor el freno está un poco flojo. Mientras pienso eso la línea deja de tener tensión ¡JOD...R! Aprieto el freno, hasta el punto que sé que la línea aguanta. Sigo lanzando señuelos, decido amarrar a la grapa un pobre Surface Cruiser ya sin pintura ni ojos...”pa' qué”, si funciona igual que nuevo.

A los tres o cuatro lances con dicho 
trozo de foam una nueva picada, tirón brutal que hace estallar el hilo en un fuerte trueno. Otra vez he perdido el bicho, me miro el carrete y veo que he apretado media vuelta más el freno de lo que debía y creía y el 5lb no aguantó.
Miro el popper al que primero habían atacado y me doy cuenta de que no es que se desclavara el primer animal, es que literalmente reventó uno de los triples. Si hubiera revistado el artificial antes me habría dado cuento y no hubiera apretado el freno, tal vez más de lo necesario.

La jornada se saldó con una persecución de otro de estos depredadores, éste lo vimos claramente y le calculamos la decena de quilos. No mordió.

Conclusión: La pesca, almenos el spinning, es una incertidumbre continua. El día en que no sea así, a otra cosa mariposa...

PD: El pobre y socorrido Surface Cruiser fue recuperado gracias a la amabilidad de un buceador que faenaba por la zona. Ahora el señuelo está restaurado, incluso ha recuperado la vista:


1 comentario:

Santi dijo...

Muy buenas tus crónicas compañero.

Por cierto, ¿qué crees que era lo que corría por ahí y que os pegó esos ataques?

Salut!